Aumenta la hostilidad de parte de los "amigos" de Job al acusarle de hipocresía. Job se aferra a su postura evangélica respecto a la gracia y defiende la perfección de Dios, pero cae en la autocompasión. Después, elocuentemente aplasta y refuta la teología liberal de los supuestos amigos, y proclama su testimonio de salvación.

De entre los supuestos amigos, Eliphaz inicia el ataque. Resentidos por la salvación evangélica de Job y deseando proteger la teología de sus obras, insisten en que Job es un hipócrita a quién Dios está juzgado. Niegan que Dios requiera santidad, solo una nota para aprobar. Con lecciones pastorales de la primera respuesta de Job.

Aquí se muestran las excelencias de Job y los encuentros que Satanás tuvo con Dios. También se nos habla de cómo Job (sin saberlo) fue colocado por Dios en tal situación para demostrar la realidad de la conversión. El pasaje así mismo señala sus abrumadoras aflicciones, la conmoción de sus amigos y su magnífico poema que muestra su consternación. Finalmente aquí se nos explica respecto a las bendiciones que perdió de vista (tal como nos pasa a nosotros).